martes, agosto 08, 2006

La noche llega

La noche llega y me trae la negación de todas las cosas,
después la negación y hasta las cosas se van,
y sólo queda la noche.

El ridículo rimbombante que le infiere
por adelantado la mañana siguiente,
a la noche,
la hacen ser un poco más velada, más ebria,
más huidiza entre lo dedos, más concreta en la razón.
Más mía.